viernes, agosto 20, 2010

Y qué de tus valores

Los valores están presentes desde los inicios del hombre. Para éste, siempre han existido cosas valiosas: el bien, la verdad, la belleza, la felicidad, la virtud. Sin embargo, el criterio para darles valor ha variado en el pasar de los años.

Los valores son cualidades que nos benefician a todos por igual, se dan en la medida en que se obtienen y se obtienen en la medida en que se dan. Entre los que más se destacan se encuentran: La libertad, la honestidad, la responsabilidad, la igualdad, la disciplina, la puntualidad, la lealtad, la humildad, el respeto, la tolerancia y el diálogo; la solidaridad, la justicia, la equidad, la fidelidad, la prudencia, la perseverancia, la integridad; aunque existe una diversidad no menos importante, todos forman la columna vertebral para regir y dirigir las acciones del hombre en sociedad.

Los valores siempre son y serán una guía que nos permita conducirnos por el camino correcto, así que se requiere siempre reforzarlos, transmitirlos, y del compromiso de aplicarlos en su exacta y justa dimensión. Esto nos permitirá en algún momento de nuestras vidas –del que espero poder disfrutar-, estar en una sociedad justa y equitativa.


“Hablar de valores es una cosa, pero vivirlos es otra”.


Llenarnos la boca recitando sobre la dignidad, la igualdad, lo justo, lo correcto y lo importante, es bastante fácil. El vivir con y dentro de valores requiere de esfuerzo, concentración y perseverancia. Vivir los valores es tener la conciencia de lo importantes que son y por lo importantes que son, hacer de ellos tu forma y estilo de vida. Una sociedad basada en individuos con valores es la clave para una convivencia sana. Las leyes no son suficientes. En ellas se establece solo lo básico para asegurar una convivencia relativamente decente y sus consecuencias ante la violación de esos cánones. En una conversación sostenida recientemente con mi padre él me decía: “…no es suficiente con solo cumplir la ley, y cumplirla no me convierte necesariamente en un hombre justo”. Los valores van mucho más allá de cumplir la norma, son la raíz de las cosas.


Para vivir los valores, hay que estar consciente de que son vitales, y que sólo éstos pueden cambiar la conducta y comportamiento de una persona, de una familia y de una nación. Cuando aceptamos los valores, como doctrina de vida, hay que analizar claramente cuáles son la base de tu vida. Aquí podríamos establecer dos clases: los que ya tienes y los que quieres tener.


No basta descubrir los valores ni basta incluso tener la capacidad de recitarlos como estrofas del himno nacional, es necesario cuidarlos, alimentarlos y educarlos cual hijo indefenso que busca de su madre refugio, pues las personas se desarrollan para mejorar continuamente como parte del actuar cotidiano. Hablar de respeto es hablar de los demás. Es establecer mi límite y saber que a partir de ahí se encuentra el respeto de los demás.


Podemos cometer el error de decir que conocemos y vivimos los valores, pensando que "somos buenos" de forma elemental: "si no engaño o miento, entonces soy honesto". La sociedad exige un comportamiento digno en todos los que participan de ella, pero cada persona se convierte en un promotor de valores, por la manera en que vive y se conduce. Lo primero que debemos hacer para conocer los valores, es desarrollar nuestra capacidad de observación, atendiendo, primero, a todo lo que se refiere a nuestra persona: hábitos, actitudes, modales y la forma en la que nos relacionamos con las demás personas, y segundo, distinguiendo con claridad las actitudes positivas y negativas que tenemos.


¿Pero entonces qué debemos hacer para cultivar y promover el uso de los valores? Aquí les dejo una propuesta: Empezar por practicar los valores individualmente y luego tratar de promoverlos en la sociedad.


“Lo importante en la vida no es tu posición, sino tu disposición”

jueves, agosto 19, 2010

Todavía creo en el amor

Aunque por su naturaleza, este espacio tiene un objetivo muy particular de presentar artículos de opinión e historia, entiendo así mismo que siempre debe encontrarse el tiempo y que cualquier lugar es apropiado para abordar temas de amor y del corazón.

El amor y desamor son el placer y dolor más dulces que nosotros, los seres humanos, podemos experimentar durante este breve tiempo y estadía que llamamos vida. Somos criaturas nacidas por amor, que viven por amor, que conviven gracias al amor y que mueren recibiendo amor.

No existe un sentimiento más profundo, confuso, poderoso y etéreo que el amor, que ser amado y que sentirse enamorado. Se dice que la medida del amor es el amar sin medida, que con un beso de amor descubres lo que callo y que cuando mi voz calle mi corazón te seguirá hablando.

Pues ahora quiero dejar algo que recientemente he escrito, pensando en alguien muy especial en mi vida, a la cual le dedico las siguientes torpes estrofas. El título, Todavía Creo en el Amor, lo he extraído de una canción que siempre me ha gustado cantada por Nelson Ned y también en nuestro país por Fausto Rey.

Todavía creo en el amor.

Puedo tratar de explicarlo tantas veces,
a tí, a todos y al cielo,
que lo que más importa al fin,
es la comunión con nuestro fuero.

Llenos de falsos valores,
socios de la dama hipocresía,
atosigados en un ventoso
camino desconocido sin sabiduría.

Todos se dirigen hacia delante,
sin tener idea de por qué motivo,
no conocen en dónde inician
ni hacia dónde los conduce ese camino.

He sido brusco y poco efusivo,
por no saber cómo explicarlo,
pero mi alma fuerte cual roble,
y mi corazón blando tal lirio.

Me he quebrado con lágrimas hasta la piel,
cuando mi ser cayó en el vacío,
más tus manos sabias y amorosas,
me soportaron ante tal destino.

Con el paso de los años el cielo aclara,
lo que para muchos tantas vidas lleva escondido,
comienza a terminar mi desesperanza,
y me empiezo a encontrar contigo.

De distracciones y engaños estamos rodeados,
para que se nos dificulte nuestro camino,
de disfrazadas mentiras que en el pasado me han mencionado,
tan difusas, tontas y sin sentido.

Ahora tu y yo sentémonos a dialogar,
y comprenderás lo que te escribo,
todos lo que somos en verdad,
no es más que un lento y cálido suspiro,
esperando encontrar al llegar al fin,
la verdad, la sinceridad y el sentido.

martes, agosto 17, 2010

Cómo se adopta el Cristianismo en el Norte de Europa

La mitología nórdica o escandinava, comprende religión, creencias y leyendas de los pueblos escandinavos, incluyendo aquellos que se asentaron en Islandia, donde las fuentes escritas de esta mitología fueron reunidas. Es la mejor versión conservada de la antigua mitología germana que también incluye la estrechamente relacionada mitología anglosajona. Esta mitología era transmitida oralmente a través de poesías de generación en generación. Nuestro principal conocimiento sobre ésta se encuentra en las Eddas (colecciones históricas de la mitología nórdina) y otros textos medievales escritos durante o después de la cristianización.

Estas creencias eran conocidas por los romanos como paganismo, del latín “paganus”, el que designa a una persona que reside en el campo. El término fue utilizado inicialmente por los cristianos urbanos de roma en un sentido peyorativo, queriendo significarla como “Religión Campesina”. Con el tiempo adquirió el término otro significado: “alguien que hace culto a las fuerzas de la naturaleza”. Más adelante, los cristianos crecieron en número y poder político, y pervirtieron el significado a “hombre sin religión o sin Dios”.

Con el único propósito de explicar una de las razones del por qué el cristianismo pudo extenderse a través de toda Europa, es necesario referirnos a Constantino El Grande, uno de los más despiadados y sanguinarios emperadores romanos. Constantino I (El Grande), aunque no se tiene su fecha de nacimiento exacta, se aproxima al año 272 después de Cristo y su muerte en el año 337. Fue emperador desde el año 306 y logró el constante crecimiento del imperio hasta su muerte. La Iglesia Ortodoxa le conoce como San Constantino.

Este sangriento emperador fue el legalizador de la religión cristiana por el Edicto de Milán en el año 313. Convocó el Primer Concilio de Nicea en el año 325, que otorgó legitimidad al cristianismo en el Imperio Romano por primera vez. En este último concilio, el de Nicea, hay posiciones que indican que en éste se trataron temas tales como: cuáles evangelios compondrían el Nuevo Testamento y La Divinidad de Jesús. Se considera que este último concilio fue determinante para la expansión del cristianismo; y los historiadores, desde Lactancio y Eusebio de Cesarea hasta nuestros días, le presentan como el primer emperador cristiano, si bien fue bautizado cuando ya se encontraba en su lecho de muerte, tras un largo catecumenado. Algunos libros de historia indican que Constantino El Grande, por la gran cuota de culpa sentida por toda su barbarie, para sus finales, procuró la aceptación de alguna de las religiones existentes en Roma. Todas las existentes rechazaron esa iniciativa como resultado de los actos sangrientos por él cometidos. Sólo en el cristianismo, Constantino encontró la aceptación a cambio del arrepentimiento de corazón para el perdón de todos sus pecados.

Así entonces, inicia la persecución cristiana contra el paganismo, el cual tenía como una de sus características el politeísmo (adoración a más de un dios), y entre los distintos dioses a los que se le rendía culto se econtraba Thor, el cual es el que pretendemos desarrollar extensamente durante este artículo.

Thor era el dios del trueno en la mitología nórdica y germánica. Su papel es complejo, ya que tenía influencia en áreas muy diferentes, tales como: el clima, las cosechas, la protección, la consagración, la justicia, los viajes y las batallas.

Era el dios más venerado de las tribus germánicas -al menos desde los primeros registros escritos hasta los últimos bastiones del paganismo germánico en la edad vikinga tardía. La mayoría de los mitos germánicos lo mencionan o se centran en sus hazañas y en los relatos de las Eddas en los que cumple el papel de protector del Midgard (el mundo de los hombres).

Su arma era el martillo de guerra arrojadizo, llamado Mjolnir, del cual se hicieron réplicas en miniatura como amuletos, que luego se convirtieron en un símbolo desafiante de los paganos nórdicos durante la cristianización de Escandinavia.

En muchas ocasiones se le consideraba como una deidad suprema. El atributo más obvio del dios Thor es su aspecto guerrero, gran cantidad de mitos lo describen abriéndose paso con su martillo de guerra entre hordas de gigantes. Sin embargo Thor, en el papel de guerrero cumple un rol protector, a diferencia de Odín que llamaba a sus seguidores a la batalla para la muerte y la gloria, por ello Thor tuvo un culto más extendido entre las comunidades más pacíficas de campesinos y artesanos. Para los islandeses, Thor era el patrón de la ley.

En Haustlöng el dios Thor es "pensador profundo", y si bien en la mayoría de las ocasiones prefiere la acción directa a la estrategia, numerosos mitos ilustran su sabiduría, tal como es el caso del poema éddico Alvíssmál donde Thor engaña al sabio enano Alvíss, pretendiente de su hija, con una competencia de adivinanzas que Thor se encarga de extender hasta la mañana para que los primeros rayos del sol conviertan en piedra al enano. La historia nos relata que cuando los relámpagos y truenos atravesaban nuestros cielos, se decía que Thor se encontraba ante una lucha contra la Serpiente Midgard.

Thor es hijo mayor del dios Odín y de la diosa Jörð, personificación de la tierra. Esta combinación convertía a Thor en el dios ideal para ser adorado por el hombre porque Odín, Dios de la Guerra y la Muerte era la imagen del Dios de dioses y el que iba a dirigir a todos los demás dioses contra las fuerzas del mal en la batalla del fin del mundo; más Jöro, diosa de la Tierra, (algunos historiadores señalan que éste no era más que un apodo de Frigg, esposa de Odin, mientras que algunos escritos la presentan como la rival), hacían de él la figura ideal por tener la cercanía a la tierra del hombre y ser superior a ellos por ser un dios hijo de dioses. Entonces las religiones veían, como hoy también, tres divisiones: El Valaskjálf (hoy cielo), ocupado por los dioses; el Midgard (mundo de los hombres), ocupada por hombres y el Jötunheim (el infierno), ocupado por gigantes, que eran una raza mitológica con una fuerza sobrehumana y opuestos a los dioses.

En uno de los cuentos mitológicos de Thor, llamado Gylfaginning, tras un incidente parte de la casa de un campesino junto a Loki y dos sirvientes, viaja hacia el Este, hacia la tierra de los gigantes y atravesando el mar llegan a una tierra desconocida. Tan pronto como cae la noche buscan refugio y se encuentran un salón muy grande donde deciden pasar la noche. A la medianoche ocurre un violento terremoto y entonces Thor y sus compañeros se refugian en una habitación lateral, quedado Thor en la entrada dispuesto a defenderse con su martillo. Al amanecer se encuentran con un gigante de enormes dimensiones, durmiendo cerca de ellos, y descubren que habían pasado la noche en el dedo pulgar del guante del gigante. Thor se acerca y pregunta al gigante su nombre y éste dice llamarse Skyrmir el cual reconoce al dios inmediatamente, proponiéndole compartir sus víveres, aunque inmediatamente se aleja. Regresa por la noche y le dice a Thor que tome víveres de su bolsa mientras él se dispone a dormir. Sin embargo el dios no puede deshacer el nudo de la bolsa del gigante y sospechando la burla de gigante decide golpearlo con el martillo, lo cual resulta infructuoso ya que el gigante apenas se despierta y pregunta si le ha caído una hoja.

A la mañana siguiente el gigante apresura a los viajeros y les dice que deben conocer al señor de esas tierras, el gigante Útgarða-Loki. Llegan a un castillo enorme en medio de una planicie perteneciente al rey, quien los recibe en su enorme salón. Luego invita a los recién llegados a participar en las competencias que ellos propongan y el primero en aceptar el desafío es Loki, quien dice que nadie puede comer a su velocidad. Sin embargo el rey llama a Logi quien come la carne, los huesos y la tabla en que le sirven. Luego el joven Þjálfi manifiesta que es capaz de correr muy rápido, y el rey invita al desafío a Hugi, quien en la competencia dobla en velocidad al sirviente. Finalmente llega el desafío para Thor quien estaba muy sediento y dice que nadie bebe como él. De inmediato un sirviente del rey le trae un cuerno y le dice que los grandes bebedores lo vacían de un solo trago; el dios no lo ve demasiado grande y bebe hasta quedar sin aire, pero el nivel de bebida se mantiene casi constante, lo intenta en dos oportunidades más y apenas logra bajarlo un poco. El rey dice sentirse decepcionado ya que había oído grandes relatos de él y le invita a levantar su gran gato, pero el dios apenas puede levantar un garra del suelo. El dios se enoja y le dice que le presente a alguien para luchar, que se anima a derrotarlo, a lo cual el rey llama a una mujer anciana llamada Elli que según dice ha vencido a muchos hombres. Finalmente el forcejeo dura un rato hasta que la anciana derrota al dios.

Luego de pasar la noche los viajeros están dispuestos a partir asombrados en la forma en que habían sido humillados, pero a la mañana siguiente el Rey de los Gigantes los acompaña hasta las afueras del castillo y le dice a Thor que nunca había conocido a alguien tan fuerte y que había sentido temor de su poderío. Le confiesa que todo había sido hecho con trucos de magia y habían sido ilusiones ópticas, que el nudo de la bolsa del gigante estaba sellado con hierro y que el gigante era él utilizando trucos de magia, y que el martillazo que le había dado había partido en tres una montaña. También le confesó que todas las cosas contra lo que habían competido se trataban de trucos de magia, Logi que lo devoraba todo, era en realidad una personificación del fuego y Hugi el veloz, era su pensamiento. Le cuenta que le provocó gran asombro que lograra bajar un poco el cuerno con la bebida ya que estaba conectado al océano y que cuando llegaran a la costa verían cuanto habían bajado las aguas, siendo esto el origen de las mareas. El gato que apenas había podido levantar, era una ilusión de la serpiente del Midgard, que rodea al mundo y que la había logrado levantar casi hasta el cielo. Finalmente la anciana con la cual forcejea y termina cayendo apoyado en una de sus rodillas, se trataba de una personificación de la muerte.

Esta misma historia, creada por los cristianos con el propósito de llevar al dios Thor al nivel del hombre común –vulnerable-, también tiene una vertiente muy similar con el Rey de los Ogros. Su variante es al final con la anciana, que en lugar de representar la muerte, representa la vejez.

El objetivo de la historia creada por los cristianos era su afán de destruir las creencias paganas y lograr el poderío de la nueva religión. Su propósito fue convertir a Thor de dios a hombre.

Otra historia más del mismo escrito, tan inteligente o más que la anterior, fue la lucha a muerte de Thor y la Serpiente Midgard. La historia relata que finalmente Thor tuvo su lucha final contra su antítesis, la serpiente Midgard, y que durante ésta la serpiente logró arroparlo y casi exprimirlo, pero que su cinturón de poder logró protegerlo de tal destino; entonces así logró tomar su martillo mágico y acertar un golpe fatal a la serpiente que le provocó la muerte, pero que durante su caída, Thor raspó su piel contra la piel de la serpiente y fue envenenado. De esa forma, la serpiente Midgard, enemiga por exelencia de Thor, y él mismo, cosiguieron la muerte. Esto dejaba claramente entendido que Thor, como cualquier hombre, era susceptible de la muerte.

Después de que estas historias lograron pasar de boca en boca y surtir un significativo efecto, El roble de Thor, un antiguo y árbol sagrado para la tribu germánica de los chatti, ancestros de los habitantes de Hesse, y uno de los más importantes sitios sagrados de los paganos germánicos, fue talado en el 723 marcando el comienzo de la cristianización de tribus no francas del norte de Alemania.

Bonifacio llegó a la zona con el objetivo de convertir a las tribus germánicas del norte al cristianismo. A su llegada taló el roble venerado por los habitantes locales en un intento de convencer a la población de la superioridad del dios cristiano sobre Thor y convencerlos de bautizarse y convertirse al cristianismo. Bonifacio utilizó la madera del roble para construir una capilla en Fritzlar, fundando un monasterio benedictino y estableciendo así la primera diócesis fuera de las fronteras del antiguo imperio romano.

Finalmente de Thor, además de la mitología que hemos podido conocer de una manera u otra, sólo nos queda el día de Thor, el jueves, que en inglés es Thursday, en alemán Donnerstag (significa "día del trueno") y en holandés Donderdag (significa "día trueno").

Hay que reconocer la genialidad de aquellos cristianos durante el poderío del imperio romano para imponer sus creencias cristianas por cuestiones políticas y económicas. Entendieron que por la fuerza el cristianismo no podía trascender en aquel territorio y que su único camino era destruir toda creencia que entrara en conflicto con la nueva religión.

domingo, agosto 15, 2010

Qué sabes de algunas de nuestras fechas festivas

Antes de iniciar con mi opinión, muy particular por cierto, quiero hacer un repaso histórico a algunos días que nuestro pueblo celebra sin tener, por lo general, idea alguna de sus orígenes e historia.

Quiero compartir con aquellos que se tomen el tiempo y molestia de leer esta nota, de que nunca he sido de los que celebra o conmemora acontecimientos por fechas impuestas –generalmente provenientes de otras culturas o sociedades.

Entiendo, y me excuso por lo que pretendo expresar a continuación, que nuestro almanaque festivo o conmemorativo ya es impresionantemente extenso con los asuntos religiosos, y que lo que ciertas fechas pretenden provocar, nunca ha surtido efecto. Si lo duda o no entiende qué pretendo dejar establecido, pregúntese qué tanto usted conoce sobre nuestra historia reciente, sobre nuestra independencia, sobre nuestra separación del dominio haitiano, de las dos ocupaciones gringas, del origen de la dictadura del generalísimo, del primer proceso democrático post la caída de la dictadura, de la revolución, de sus verdaderos héroes, de los sangrientos doce años de Balaguer.

Aunque no soy muy bueno recordando las cosas, no necesito fechas ni celebraciones para reconocer sólo en mayo que mi Madre es la mejor de todas las madres, ni en marzo para tener la convicción de lo valiosa que es la mujer en todos los ámbitos, ni en este mes de agosto para felicitar a aquellos jóvenes que han sido ejemplo con sus conductas morales y actuaciones atinadas.

Estoy convencido que, para continuar en el mismo orden de ideas, en la mayoría de las ocasiones estas celebraciones o conmemoraciones son simplemente aprovechadas por grupos que se dicen políticos -en lugar de aprovechadores-, para brillar ante las cámaras y tener sus cinco minutos de fama.

Soy de los que creo que nuestras fiestas, las nuestras en verdad, deberían ser celebradas no con días no laborables, sino con actos conmemorativos asociados al hecho, por varios días inclusive, dentro de nuestras escuelas y colegios para que esos jóvenes tengan una educación de calidad, y así, en su porvenir, conozcan nuestros errores y virtudes, en lugar de estar en la babia y ser completos desconocedores de nuestros vaivenes históricos.

Lo que hoy celebramos como Día Internacional de La Mujer es lo que estamos acostumbrados a leer en los escritos de sobre una huelga, que aconteció en Nueva York, en 1857, en la cual 129 obreras murieron después que los patrones hubieron incendiado la fábrica ocupada. La primera mención a esa huelga, aparece en el periódico del Partido Comunista Francés, en la víspera del 8 de marzo de 1955. Pero donde se fija esta fecha del 8 de marzo relacionada con esta huelga es en una publicación que apareció en Berlín, en la entonces República Democrática Alemana, de la Federación Internacional Democrática de las Mujeres. El boletín es de 1966. ¿Cómo se llegó a crear toda la historia de 1857? ¿Por qué aquel año? ¿Por qué en los EUA? La explicación, probablemente, es la combinación de casualidades, sin ninguna intención diabólica ni preestablecida. Así es como nacen todos los mitos. La canadiense Renée Côté investigó, durante diez años en todos los archivos de Europa, EUA y Canadá y no encontró ninguna pista de la huelga de 1857. Ni en los periódicos de la gran prensa de la época, ni en cualquier otra fuente de memorias de las luchas obreras. Ella afirma y reafirma que esa huelga nunca existió. Es un mito creado a causa de la confusión con las huelgas de 1910; de 1911, en los EUA; y 1917, en Rusia. Esa confusión se dio por motivos histórico-políticos, ideológicos y psicológicos.

En Estados Unidos, el Día de las Madres es el resultado de la iniciativa de una joven, Anna Jarvis, hija de Anna Reeves Jarvis, una activista comunitaria de Virginia Occidental, que hacia 1858 tuvo activa participación en la organización de las mujeres para trabajar en la mejora de la sanidad pública en las comunidades apalaches durante la Guerra Civil Estadounidense, colaborando también en el cuidado de los heridos de ambos lados de la contienda y, más tarde, organizando reuniones para que los antiguos enemigos se integraran y confraternizaran. Anna, que perdió a su madre en 1905, comenzó a enviar cartas a políticos, abogados y otras personas influyentes, solicitando que se consagrara Día de la Madre el segundo domingo de mayo (el cual algunos años coincidía con el aniversario de la muerte de su madre).

El Día de los Padres, igual que el de la madres, es también una iniciativa de una joven estadounidense llamada Sonora Smart Dodd. La señora Sonora Smart Dodd quería que existiera un día especial que honrara a su padre, Henry Jackson Smart, el cual fue un veterano de la guerra civil, que se convirtió en viudo cuando su esposa (la madre de la señora Dodd) murió en parto con su sexto niño. El padre de la señora Smart crió a todos sus hijos y mereció su reconocimiento de hija como padre ejemplar. El primer día del padre se celebró el 19 de junio de 1910 en Spokane, Washington. En 1924 el presidente Calvin Coolidge hizo el día del padre como una celebración nacional y finalmente en 1966 el presidente Lyndon Johnson firmó una proclamación presidencial que declaraba el tercer domingo de junio como día del padre.

Terminando con las reseñas e iniciativas históricas, todas provenientes de Estados Unidos por cierto, hacemos referencia al Día Internacional de la Juventud, el que se celebra en distintos países del mundo, desde que en 1998 la Asamblea General de las Naciones Unidas decidiera que el 12 de agosto fuese un día dedicado a los jóvenes. Se ha intentado que la conmemoración de esta fecha sirva de vehículo para la reflexión sobre los problemas de la juventud en el mundo; entre los que se citan la brecha que existe, en materia de educación, entre la juventud de las poblaciones rurales y urbanas.

Ahora bien, por qué no hay celebraciones o conmemoraciones a momentos históricos como los asociados a las batallas Fuente de Rodeo del 13 de marzo, 19 de marzo, 30 de marzo, del Memiso, la Estrelleta, Beler, Del Número, De Las Carreras, Santomé y muchas otras coligados a nuestra separación de Haití. Por qué no conocemos esas fechas. Por qué no hay lutos conmemorativos a fechas como 29 de noviembre y 28 de abril (primera y segunda ocupación estadounidense respectivamente). Por qué sólo conocemos dos o tres nombres asociados a la revolución y no tenemos idea de quienes fueron Vinicio Fernández Pérez, Giovanni Gutiérrez, Rafael Fernández Domínguez. Por qué el Día Internacional de la Mujer o el Día de las Madres no hace también homenaje a mujeres dominicanas como Aniana Vargas, a doña Edna Mur, Picky Lora, Ivelise Acevedo, las hermanas Vásquez Fernández, Rochi González, Cristinita Díaz, Gloria Acevedo, Xiomara Saladín, María Elena Muñoz, Norma Vásquez y sus hermanas, Cándida Oviedo, doña Andrea, Lida Pelegrín, Ana Silvia Reynoso, Queyita Santos Josefina, Rosalba Paniagua, Tomasina Cabral, Asela Morel, Josefina Padilla viuda Sánchez, Dulce Tejada de Álvarez, Miriam Morales y Fe Violeta Ortega Guzmán, todas éstas luchadoras o guerrilleras o feroces opositoras al régimen trujillista.

Le dejo a usted que se forje un juicio de valores y que quizá pueda responderme a esta interrogante. En verdad les digo que durante muchos años he tenido demasiadas cuestionantes al respecto, y casi ninguna respuesta válida y apropiada como solución.

Solo Opino

Aunque no tengo el hábito de escribir sobre sucesos o acontecimientos que todos, de una manera u otra, reflexionamos y discutimos en nuestros círculos de confianza, me veo en esta ocasión atraído a hacerlo por indignación.Todos hemos discutido, unos más que otros, sobre el marcado problema de valores y la poca educación de nuestro pueblo; pero cuando vemos y leemos en nuestros medios de comunicación - éstos responsables de forjar opinión, que Figueroa Agosto y Sobeida, en lugar de ser proyectados como lo que son: sociópatas, son, en su lugar, presentados como figuras públicas, iconos o modelos a seguir.

Esta situación, esta realidad, debería de preocuparnos a todos en una justa proporción. Hagamos el siguiente ejercicio: qué debe entender la joven que solo escucha sobre sobeida lo costoso de su ropa, de su buen gusto para ésta, de los lentes que utilizó o de la cartera que exhibió. Qué debe entender esa joven que tiene dificultades para el acceso a bienes y servicios básicos y de primer orden. Qué estamos enseñando.

Es probable que por el poco interés que le merezco a nuestra prensa, desconozca de las posiciones adoptadas por los comentaristas. Si es ese el caso, me disculpo, celebro y aplaudo tal posición desconocida por mí. Sin embargo, y pido excusas nuevamente, hoy por hoy sólo escucho lo mismo: hechos repetidos de una nota de prensa de nuestras instituciones responsables de la seguridad.

Quisiera tener la oportunidad de preguntarles a uno que otro comentarista, qué sabe de Figueroa Agosto, evitando las respuestas de casas y vehículos incautados, mujeres que tuvo, y su condena, fuga y posterior arresto. Me gustaría saber si conoce una cifra aproximada de muertes por él ocasionadas, de nuevos adictos a las drogas por su tráfico y de familias destruidas por sus actos. En el mismo orden de ideas, que me informen si existe algún análisis clínico que explique las conductas desviadas de Agosto y Sobeida, y qué estrategia de país pretende adoptar nuestro gobierno frente al alto crecimiento del consumo de drogas.

Reflexionemos, hoy los valores son prácticamente inexistentes, los antivalores son la norma y la moda; y esa clase de orientación a la información de las noticias, induce a que jóvenes en pleno desarrollo mental y adultos, carentes de moral por un lado, y necesitados por el otro, entiendan que el camino a seguir es ese, el de esos degenerados, asesinos, corruptos y corruptores, y que los guías de ese funesto tren de muerte son Agosto y Sobeida.